Fiesta de Santiago Apóstol

El 25 de Julio -Día de Santiago Apóstol-, lo celebramos con misas durante todo el día, música, baile y la ceremonia del incienso en honor al Tata Santiago, una festividad de los pueblos originarios andinos que celebran al Apóstol Santiago con su folclore ritual.

Cada año, la Celebración de Santiago Apóstol en la villa es realmente una fiesta, que combina el calendario litúrgico católico con rituales populares de la cultura andina precolombina, que veneran a esta advocación cristiana con matices, con los apelativos de Tata Santiago, Santiago de Bombori o el Señor de Bombori.

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25 de Julio de 2018: Comitiva lista para ingresar las imágenes en la Misa de las 3 de la tarde. Las mujeres, con capa blanca. Los niños ofrecen flores.

Ingreso de las imágenes en la Misa de las 3 de la tarde:

 

La primera Misa del día fue al mediodía. Luego, la Misa de las 3 de la tarde fue musicalizada por el grupo Haravicus con canciones de la Misa Criolla (Ariel Ramírez-Félix Luna) y del cancionero del misal popular. Haravicus significa en idioma quechua “creadores de poesía”. En la cultura precolombina, los Haravicus eran los artistas que, con música y danzas, animaban los grandes acontecimientos sociales (los nacimientos, la cosecha, los funerales, el amor). Aquí, cantando y recitando el Padre Nuestro con la melodía de «Los sonidos del silencio», popularísima canción de Paul Simon:

 

Inculturación del Evangelio

La imagen de Santiago Apóstol llegó a Potosí en el estandarte de la primera expedición de Colón a América. Los pueblos originarios identificaron su figura con una deidad andina llamada ILLAPA (o Chuqilla, Catuilla o Libiac), que era el dios del rayo, el trueno y la lluvia. Los Incas veneraban a esta deidad para que hiciera llover y regara las cosechas. Creían que hacía llover desde la Vía Láctea con agua que guardaba en una jarra. Por la flexibilidad del mensaje cristiano, sucedió una inculturación del Evangelio en las diferentes culturas originarias, sin avasallarlas. Son las «Semillas del verbo» según los Padres de la Iglesia, o el “sincretismo religioso”: el fenómeno de que diferentes culturas del planeta sin conexión entre ellas alaben a figuras similares o desarrollen las mismas creencias, lo que confirma la Universalidad de Dios, y que el alma humana es la misma en todas partes. Dios no es una construcción humana: es el Mismo para todas las culturas, y se comunica con el hombre con un idioma único que todos entienden, como si su voz fuera una música que todos comprenden, hablen el idioma que hablen.

 

Hoy no hay rayos, ni truenos, pero llueve y mucho, adentro también, porque el Padre Pedro nos empapó con agua bendita en la bendición final de la Misa de 3. Afuera, la tormenta no amedrenta la Fe del Pueblo. Mas bien la intensifica, y a lo largo del día, cada vez lloverá más, y en cada Misa, la Iglesia está cada vez más llena de fieles. El pueblo es sabio, sabe que la Fe obra Milagros, y el Tata Santiago es muy venerado porque es muy milagroso. Por la fe, los pueblos  sometieron a otras naciones, impusieron la justicia, vieron realizarse promesas de Dios, cerraron bocas de leones, apagaron la violencia del fuego, escaparon del filo de la espada, sanaron de enfermedades, se mostraron valientes en la guerra ….» (Carta a los Hebreos, 11-33)

Otra de las Misas de este día de fiesta fue la de las 6 de la tarde, en la casa de la Familia León, en el Barrio Fátima. Allí, rezamos para que Dios bendiga a todas las familias de la villa, y el Padre Adrián también participó de la ceremonia del incienso, luego de la Misa.

 

Misa Mayor con Confirmaciones y Primeras Comuniones

Para la Misa de 7, las imágenes del altar del Tata Santiago fueron coronadas por un arco con flores y aguayos, la tela artesanal realizada por las mujeres bolivianas que simboliza la maternidad y la madre tierra.

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La Misa de 7 fue celebrada por Monseñor Gustavo Carrara, que otorgó los Sacramentos de la Primera Comunión y la Confirmación a un grupo de adultos que fueron preparados por el Padre Adrián y el catequista Quique durante toda la Novena a Santiago Apóstol. Recibieron el Sacramento de la Confirmación Modesto, Roxana Andrea, Cecilia Carolina, Marlene, Victor Hugo, Marlene, Noemi Jackeline y Josefa Gloria. Y los sacramentos de la Primera Comunión y de la Confirmación los recibieron Jesus Marcos, Lusmila Carolina, Victoria Sandra, Gina Mabel, Katerin Michelle, Danitza, Epifania, Margarita y Yoselin.

 

Luego de la misa, el Obispo también participó de la tradicional ceremonia del incienso. Al Tata Santiago o Señor de Bombori se le ofrece incienso, en posición de reverencia -o de rodillas-, y en actitud orante, se empuja y se sopla el humo hacia las imágenes, mientras se pide y se agradece. Mientras se reza.  

 

Si bien Santiago Apóstol fue nombrado Patrono de Potosí en 1555, en procesión solemne junto a las imágenes del Santísimo Sacramento y de la virgen de la Candelaria de Copacabana según el historiador Bartolomè Arzàns de Orsua y Vela (1676-1736), es venerado en toda América ya que muchas ciudades latinoamericanas fueron fundadas con su nombre: Santiago de Chile, Santiago del Estero, Santiago de Cuba, Santiago de Guayaquil (Ecuador) y Santiago de León (Venezuela).

 

La imagen del Tata Santiago y la de Santiago de Bombori no es la misma, aunque su culto sí es igual. El Tata Santiago está montado en su caballo, espada en mano, cortando cabezas de moros, pisando idólatras, al igual que la de Santiago Apóstol. En cambio, Santiago de Bombori va de a pie, ya que -cuenta la leyenda- una mañana en que dejaron abiertas las puertas de la Iglesia de la zona de Pumpuri, se lo vió a Santiago de Bombori dirigiéndose a una apacheta (columna de piedras) y cuando bajó para observarla, el diablo en forma de serpiente auyentó su caballo blanco. Bombori lleva una biblia en la mano izquierda, la espada en la derecha, sobre el pecho el Corazón de Jesús y a los pies la Luna de la Virgen María.

También en el pueblo de Chaquí -a 35 km de Potosí- se venera a Santiago de Chaqui, subido al caballo, pisando infieles.

 

Pescador de hombres

Según consta en La Biblia, el Apóstol Santiago es hermano del Apóstol Juan, ambos pescadores del Mar de Galilea, a los que Cristo miró a los ojos, y les propuso: “Síganme, y yo los haré pescadores de hombres” (Mateo 4, 18-22). La forma de ser de Santiago y su hermano -ardorosos en defender a Jesús- hizo que Cristo los llamara “hijos del trueno” (Marcos 3,17). Santiago era tan impulsivo que cierta vez que Jesús no fue bien recibido por los samaritanos, Santiago le sugirió que hiciera caer fuego del cielo para castigarlos. ¡”No, no”!, le dijo Cristo, predicando que la violencia nunca es el camino. La apasionada defensa cotidiana de la Vida no implica brutalidad ni agresión. Salvo en la guerra, en la que está “permitido” matar, y por eso muchos creen que la guerra debe ser prohibida. Cuenta la leyenda que durante las Cruzadas (año 844), se apareció Santiago Apóstol en Clavijo -actual territorio de España-, montado en su caballo blanco salvó a la población de los moros invasores cortandoles las cabezas desde arriba de su caballo blanco, por lo que es conocido como el “Santo matamoros”.

El simbolismo de esa personalidad de fuego del Santo coincidió con la de la deidad andina Illapa, dios del rayo, el trueno y la lluvia, y convirtió al Tata Santiago y a Santiago de Bombori en sus representaciones folclóricas en el nuevo mundo, con características opuestas como las dos caras de una misma moneda: En Latinoamérica, el Tata Santiago es tan venerado y como temido, tanto como para que los devotos eviten a toda costa hacerlo enojar, al punto de que se retiran de sus altares caminando para atrás, como un cangrejo, para no darle la espalda. No vaya a ser que se enoje y haga caer granizo o rayos. Según la tradición, el Tata Santiago es tan bueno como para hacer llover y así regar los campos cosechados, y tan fiero como para enfurecerse al punto de producir incendios con los rayos que hace caer del cielo. Pero su luz también ilumina y es muy milagrosa, quizá por eso las ermitas del Tata Bombori están iluminadas desde adentro. Ni los santos son perfectos.

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